EFECTOS SECUNDARIOS
El Secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, “Queremos un Dólar estable”
Foto CNBC.COM
Los múltiples estímulos que se han realizado a la economía para no permitir que la pandemia tenga efectos desbastadores, como todo medicamento, tendrán efectos secundarios. En marzo, la Reserva Federal (FED) colocó las tasas de interés en mínimos (0%-0,25%), e inició un agresivo aumento en su hoja de balance de 67,5%, llevándola de $4,16 a $6,97 biillones, comprando activos en mercado secundario. De igual forma, el Congreso aprobó ayudas por $3,6 billones, que fueron asignados a familias y a negocios, además a compras por material sanitario. También se destinaron parte de los fondos para asistir a las personas que perdieron su empleo, otorgando $600 semanales hasta el 31 de julio.
En el gráfico a continuación se muestra el fuerte aumento del M2, o cantidad de dinero circulante, que incluye depósitos, así como activos de alta liquidez (fondos mutuales y certificados de depósito están incluidos, no incluye acciones ni bonos). El M2 es un indicador muy utilizado por los economistas para predecir la inflación y para inferir movimientos de política monetaria. Como se observa, el M2 ha aumentado un 19,25% desde marzo de este año, en la misma proporción que lo hizo desde aproximadamente agosto del 2016 hasta marzo del 2020.
Gráfico 2: M2 de los Estados Unidos desde el 2015 hasta hoy. Fuente: Bloomberg.
El Secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, declaraba esta semana: “Queremos un Dólar estable”; “Es la moneda reserva del mundo y protegeremos eso”. Sin embargo, tras una emisión de dólares de esta magnitud, se empiezan a ver las consecuencias. La onza Troy de oro cotiza hoy a su máximo histórico $1.900,06, incrementando su precio un 25,26% en el año, lo que revela una desconfianza muy grande por parte de los inversionistas en el valor que pueden tener las monedas tras las emisiones por sus Bancos Centrales. Además, el Euro cierra la semana a $1,1633 con un avance de 3,74% en lo que va de año respecto al USD. El dólar ha caído más de 5% en tres meses contra la cesta de las seis monedas más grandes, medido por el índice DXY.
La inflación en los Estados Unidos cerró en 2,3%. En la actualidad es de 0,6% tras la fuerte caída de los meses entre marzo y mayo. A pesar de que el titular de la FED, Jerome Powell, ha señalado en múltiples declaraciones, no preocuparse por la inflación en estos momentos en los que hay problemas más graves, no hay que perderla de vista. El próximo reporte de la inflación será el 12 de agosto.
Un incremento brusco de la inflación, con un alto número de desempleados, y en vías de recuperación económica tras la pandemia, puede ser un ambiente muy hostil para que la FED resuelva subir las tasas de interés, como medida para contenerla.