El Especial WMC

Credito Composición de WMC:

Invertir en bolsa profesionalmente requiere de una estrategia. Decidir si la gestión será activa o pasiva definirá muchos aspectos del portafolio. Una estrategia de manejo de portafolio pasiva busca replicar el rendimiento de un índice teniendo algunas herramientas que protejan ante posibles caídas. En líneas generales esto se logra comprando en proporciones similares las posiciones del índice. En otros casos también se compran las acciones de mayor influencia en el índice, logrando un objetivo parecido. Por su parte, la gestión activa es mucho más diversa en el sentido de que comprende posiciones tal vez completamente diferentes a las de los índices, con el objetivo de conseguir mayores rendimientos. Esta estrategia se concentra más en buscar aquellas acciones subvaloradas que tienen potencial para multiplicar su precio. 

A lo largo del año 2020, la pandemia arrastró a los principales índices americanos a correcciones superiores al -30%. Sin embargo, al finalizar el año, lograron recuperarse y cerraron en terreno positivo: Dow Jones en +7,24%; el  S&P500en +16,26%; y el Nasdaq Composite termina con un sorprendente +43,64%. A pesar de la incertidumbre, los índices se avanzaron, pero esto no fue suficiente para ganarle a la gestión activa. El año fue espectacular para las estrategias que invirtieron activamente en nombres que multiplicaron varias veces su valor y de forma muy rápida. El ejemplo más notorio de gestión activa, fue la realizada por los fondos ARK, cuya toma de posiciones en acciones de alto riesgo permitieron que su fondo ARK Innovarion ETF tuviera un desempeño neto de +143,73% en el año (Véase gráfica 2). 

Gráfico 2: Comparación de desempeño del índice S&500 (línea naranja), y el Fondo .ARKK (línea azul). Datos desde desde diciembre 2020 hasta hoy. Funte: Bloomberg

El año 2021 ha sido completamente distinto. El desempeño de los principales índices ha sido muy difícil de superar por una gestión activa. El fondo ARKK se ha desplomado -24,95%, como se observa en la línea azul del gráfico 2. En un año tan bueno para los sectores financieros y de energía, el índice Dow Jones ha tenido un desempeño hasta hoy de +12,98%. Las acciones de las FAANG+M (Facebook (FB), Apple (AAPL), Amazon (AMZN), Netflix (NFLX), Alphabet (GOOGL) y Microsoft (MSFT), principales componentes de los indices, han tenido excepcionales desempeños, pero solo ellas han impactado la cotización del índice. No así el resto de los componentes.

Como se observa en el gráfico 3, el día 30 de noviembre solo 32 acciones del índice S&P500 se encontraban en máximos de las últimas 52 semanas y el índice estaba a tan solo 2% de su punto más alto. Ese mismo día 85 acciones de este índice marcaban su mínimo de 52 semanas. Más de la mitad de las acciones en el S&P500 se encuentra a por lo menos 10% de su punto más alto del último año. Lo mismo sucede en el índice Nasdaq 100. El día 27 de noviembre este solo se encontraba a 4% de su punto más alto, sin embargo 30 acciones de las 100 que lo componen se habían desplomado al menos un -20% (este viernes seguramente este número es mayor.) Destacan: Peloton (PLTN) -71%, Pinduoduo (PDD) -69%, Zoom Video (ZM) -46%, Paypal (PYPL) -21,46%, etc.