El índice que mide la volatilidad (VIX) alcanzó esta semana su punto máximo desde el año 2008, época en la que el mercado financiero mundial experimentó un quiebre por la explosión de la burbuja inmobiliaria. A finales de ese año, con la quiebra de Lehman Brothers, el VIX marcó 80,86. Esta semana y tras las medidas anunciadas por el presidente Trump, el pánico se hizo sentir en el mercado y el VIX alcanzó 75,47. Esta ha sido la primera semana desde el año 1929 en el que cada día el índice S&P500 ha tenido fluctuaciones de +/- 4%.  

El concepto de “bull market” o mercado de tendencia alcista, lo define como un mercado que se mueve constantemente al alza, cotizando a nuevos máximos, sin tener una corrección o caída mayor a -20%. Esta semana, y tras 16 sesiones desde el máximo histórico, el índice S&P500 cayó -20%, diciéndole adiós al bull market que mantenía desde el año 2009. Por su parte el índice Dow Jones tardó 19 sesiones en caer -20%. En el siguiente gráfico se observa cuantos días le ha tomado al índice tener caídas de -20% desde su punto máximo. En la crisis financiera del año 1929 le tomó 39 sesiones. 

La violencia de esta caída no ha tenido precedentes. Hay muchos inversionistas que han usado las bajas tasas de interés para apalancarse y cuando sus márgenes se han consumido, han sido obligados a vender, potenciando esta fuerte caída. 

Es importante destacar que el evento del coronavirus es muy probable que lleve a varias economías del mundo a recesión. Los índices bursátiles ya cerraron el bull market y ahora es posible que los PIB de la Zona Euro, algunos mercados emergentes, y Estados Unidos se contraigan. 

En China, empresas que llevaban por lo menos tres semanas cerradas han empezado a reincorporarse a sus actividades tras el anuncio de tener algún tipo de control sobre la propagación del virus por parte de las autoridades. Europa en estos momentos se encuentra en cuarentena, o como estuvo China hace dos semanas. Estados Unidos apenas luce como China a mediados de enero. Este tema está en pleno desarrollo.