El martes 3 de noviembre serán las elecciones presidenciales en Estados Unidos. A tan solo 11 días de este importante evento, analizar las propuestas de cada candidato y tener una idea de las consecuencias que estas puedan tener en el mercado, es importante para los inversionistas en estos momentos de alta incertidumbre.

El presidente Trump usa el desempeño del índice Dow Jones como un indicador de la economía. Durante su presidencia, este índice ha aumentado un 42,8%. Con los mismos días en la Casa Blanca, Bill Clinton (D), vio crecer el índice un 82,2%; George Bush (R) decreció un -7,9%; y con Barack Obama (D) aumentó 63,7% (gráfico 2). Se puede decir que el presidente Trump es pro mercado. Durante su presidencia se ha desregulado el sector bancario, y la se han realizado una serie de recortes de impuestos. También ha apoyado a la industria petrolera americana, que logró records históricos de producción. Sin embargo, el mercado mostró mucha incertidumbre por el conflicto comercial que sostuvo con China, y todo lo que esto implicó hasta llegar a un acuerdo que poco se ha cumplido debido a la pandemia. La respuesta de política monetaria y fiscal hacia la pandemia ha sido una inyección masiva de liquidez en el sistema, que ha permitido la estabilidad en el mercado y la sobrevivencia de individuos y sectores muy perjudicados. El presidente Trump ha mencionado en repetidas ocasiones, que China debe ser responsabilizada por el contagio mundial del COVID19, por lo que se puede esperar nuevas tensiones entre las dos potencias económicas, en caso de ser reelecto.

El ex vicepresidente Joe Biden ha sido enfático en su propuesta de aumento de impuesto a las ganancias de capital. También ha anunciado un aumento de impuestos para personas que tengan ingresos superiores a los $400.000 anuales. En materia energética ha sido firme en el apoyo a las energías limpias. Espera poder ampliar la cobertura del Obamacare, si es que la Corte Suprema no suprime el “Affordable Care Act”, decisión que tendría repercusiones en el sector asegurador, farmacéutico y de salud. Es posible que una presidencia de Joe Biden aumente la regulación bancaria.

No es recomendable realizar inversiones pensando en uno de los dos candidatos. Lo ideal es esperar el resultado de la elección y desde ese punto tomar decisiones para construir el portafolio. En caso una continuidad de la presidencia de Trump, sectores como el de energía, bancario, farmacéutico, y defensa pueden beneficiarse. Se puede pensar que en riesgo sería mayor para las compañías que tienen altos intereses en China. En caso de resultar vencedor Joe Biden, las compañías que tengan que ver con energías limpias tendrán probabilidades de beneficiarse. En cambio, podrá esperarse una mayor regulación en perjuicio de los sectores energía y financiero. En ambos casos, una regulación de las empresas tecnológicas parece inevitable.